En esencia, las personas- y los pueblos- desarrollamos actitudes basadas en cumplir nuestros deseos.
Las formas de los pueblos y las personas son formas de obtener lo que queremos de todo lo que nos rodea. Ordinariamente esas formas se desarrollan en la infancia- también la formación de los pueblos- y después se “insertan” en la sociedad más amplia- o un país o región en la sociedad global.
Existe en las personas el impulso de hacerse de “armas” y recurren a las amenazas e intimidación e invasión de las cualidades y posesiones del otro- y existen los abogados en las sociedades y entre los países la carrera armamentista. Existe en las personas el “complacer” con voz suplicante y amable- o de “dolor” o incluso “llanto” buscando una reacción “paternal” o “maternal”- a quien en ese momento calculan que tiene el “poder” o los “recursos” para entregarle lo que quiere y existen entre los países los tratados y acuerdos de intercambio y asistencia y subsidios incluso “corporativos” e incluso para la “realeza”- y combinado con las armas y la amenaza, existe la “diplomacia”.
Existe el difamar y darle cierta imagen a quien o quienes “no queremos” que obtengan lo que quieren-aun si no sabemos qué es- para que no puedan entrar en contacto con otros y obtener “algo”… y en las sociedades existen los medios masivos. Existe entre las personas el hacer sentir “bien” a alguien y hacerle creer que se sentirá “bien” consigo mismo si te da lo que quieres, y en las sociedades existe la propaganda y la publicidad…etc.
Todas estas formas se desarrollan y se combinan en todo tipo de sociedades y al final en una sociedad global. En principio, podríamos clasificar y describir el desarrollo a “detalle”, haciendo “predecibles” cosas que consideramos “impredecibles”. Pero eso no es interesante ni útil, lo interesante y útil es el desarrollo general y hacia dónde se dirige.
En general, una persona y una región o sociedad cambian de “táctica” no de forma planeada ni consciente, sino cuando su forma de operar deja de “funcionar”, y esto es después de un “choque” o una lucha: la parte más “débil” llega a un punto en que está amenazada su supervivencia o entra en contacto con otras formas de comodidad y disfrute y las anhela, la parte “alta” de esa sociedad está acostumbrada a las amenazas y las armas para obtener de ellos lo que quieren y darles lo mínimo que les perite seguir “sirviéndolos”, su forma de operar automática considera un “abuso” el que no hagan no se conformen con lo “acostumbrado”- como sucede entre las personas- y ordena la “represión”, la parte débil y mayoritaria “responde”, ambos intentando imponer su “voluntad”, surge la revolución armada y las guillotinas—al final, después de muchas vidas y sangre, nadie se “impone”, surge otro tipo de relación entre las dos partes y otro tipo de “legalidad” y gradual y lentamente ese “nuevo acuerdo”- o constitución de la república- comienza desarrollarse.
Esto también sucede dentro de una persona con respecto a los anhelos que son más fuertes y los anhelos dentro de él que son más “tenues” y no son siquiera conscientes. Que también mediante dolor se desarrollan gradualmente.
El punto de ese desarrollo, una vez más es: ¿Hacia qué, hacia dónde?
La historia es muy clara acerca de esto si quisiéramos verlo: eventualmente una persona “poderosa” se “debilita” hasta descubrir que el “poder1ue creía 2real” era una “fantasía”, al final, desaparece junto con su poder. Una persona con muchas posesiones desaparece y las posesiones se distribuyen en una red o se “pudren” y forman parte una vez más del entorno natural como su cuerpo, los conocimientos que alguien genera, con suerte, eventualmente serán considerados falsos e incompletos…y en última instancia, lo que permanecerá de una persona, con suerte, son ciertas inclinaciones desarrollándose en otras formas en su descendencia biológica o ideológica.
De la misma manera, los imperios colonialistas se desvanecen y transforman en corporaciones globales comerciales y militares, preservando solo las conexiones que generaron sus exploraciones y explotación, a su vez, las formas de hoy se desvanecerán pero dejarán otro tipo de conexiones que unan más estrechamente al mundo y lo hagan cada vez más interdependiente.
Por lo tanto, sabemos que al final todos servimos a la construcción de esta red de conexiones y su tendencia hacia una unidad cada vez más estrecha. En el proceso puede parecer que alguien “vence” y “elimina” a otra parte, pero solo la “oculta” y después volverá a manifestarse para completar toda la red de conexiones y unidad- todos nuestros movimientos para excluir y explotar e incluso “matar” a otros son movimientos que al final contribuyen a este proceso.
No existen los “excluidos”, es solo una fase del proceso.
Es como “comprar” a un “sirviente” para que sirva para todas tus satisfacciones personales-incluso de “honor” y “respeto”- y sin que él ni tú se lo propongan, terminar sirviéndolo tú a él-o más propiamente-: sirviendo a la función y el objetivo que cumplirán ambos.
Por supuesto que al hablar de esto, debemos mencionar que existe la posibilidad de que este proceso sea consciente, planeado y guiado directamente hacia la meta.
Snakeeskin 